Ganancias: prevén subir 15 por ciento el mínimo no imponible

El Gobierno mandó finalmente anoche a la Cámara de Diputados su proyecto de reforma del Impuesto a las Ganancias, que establece que pagarán este impuesto los solteros que cobren más de 21.712 pesos mensuales y los contribuyentes con hijos que ganen más de 25.231 pesos por mes. En el primer caso, la suba es del 15 por ciento (el piso era de 18.880) y en el segundo caso también, pero no hay mejora (era de 25.000), porque el texto elimina al cónyuge de las deducciones posibles.

Sin embargo, el Ejecutivo afirma que se reducirán notablemente las porciones salariales afectadas por este gravamen debido a dos cambios clave. Uno es la suba en los pisos sucesivos a partir los cuales se van pagando las alícuotas. Desde hace más de una década, sobre los primeros 10 mil pesos que pasaban el mínimo no imponible se pagaba un 9 por ciento; sobre los segundos 10 mil, un 14 por ciento y así, hasta llegar a un máximo de 35 por ciento. Con la inflación, cada vez más asalariados pagaban ganancias y, además, pagaban alícuotas cada vez más altas sobre porciones crecientes del sueldo.

En la propuesta, esos montos se multiplican por seis en el primer año. Y además se reducen las alícuotas, partiendo del 5 por ciento y llegando al mismo máximo del 35 por ciento. También crea una alícuota de dos por ciento para quienes queden alcanzados por primera vez por Ganancias (antes pasaban directo al 9 por ciento)

Si se aprueba, el año que viene se pagará 5 por ciento (no nueve), pero sobre los primeros 61 mil pesos que excedan el no imponible. Recién sobre los siguientes 30 mil pesos se pagará una alícuota de 10 por ciento (no de 14). Los límites de las escalas, además, volverán a multiplicarse en 2018 y 2019. Ejemplo: en 2018 la alícuota más baja (5 por ciento) regirá para los primeros 124 mil pesos imponibles y no sólo para los primeros 61 mil, como sería en 2017.

Para la especialista Dina Castillo, los cambios acentuarán la progresividad del impuesto porque a partir de 2019 el piso para el tramo más bajo (sobre el que se paga la menor alícuota) aumenta 14 veces, mientras que el piso a partir del cual se paga la mayor alícuota crecerá ocho veces.

Castillo da este ejemplo: una persona que cobre 979.000 netos al año va a pagar una alícuota efectiva (promedio sobre el total del sueldo) en 2017 de 29,25 por ciento; en 2018 de 25 por ciento; y en 2019, de 21 por ciento.

El economista Andrés Mir, del Iaraf, organismo que preside Nadin Argañaraz, asesor de Prat Gay, hace un planteo similar al de Castillo. Un empleado casado con dos hijos que en 2015 tenía un salario bruto mensual de 30 mil pesos, pagó en 2015 un 9,2 por ciento. Si por la inflación su sueldo aumentó a 40.500 este año, pagó, tras las exenciones dadas por el Gobierno, un 5,1 por ciento. Si se aprueba la reforma y su salario crece según la inflación estimada por el Gobierno, en 2017 pagará 4,2%; en 2018, 3,5%; y en 2019, 3,4%.

Según Mir, la reforma, de aprobarse, le costaría al Estado 21 mil millones de pesos, el 15 por ciento de lo que se recauda por el Impuesto a las Ganancias que tributan los asalariados. Es otro modo de ver, en forma global, la rebaja.

Claro que eso dista de la promesa electoral de Macri de “eliminar el impuesto a los trabajadores”.

El oficialismo quiere tratar el proyecto en extraordinarias el 14 de diciembre, pero es minoría y deberá negociar con la oposición. Si lo aprueban, deberá ir al Senado. Es difícil que rija en enero. La aprobación podría quedar para marzo. Pero, como el impuesto es anual, se devolverían de modo retroactivo los pagos de los primeros meses del año.

El proyecto también elimina deducciones que podían hacerse hasta hoy y que, por ende, subían el mínimo no imponible: sólo podrán deducirse hijos de hasta 18 años de edad (hoy es hasta 24 años) y ya no podrán hacerse deducciones por padres, abuelos, padrastros y bisabuelos, dado que hoy, a diferencia de cuando se sancionó la ley, la cobertura jubilatoria es casi total.

El proyecto no establece la actualización automática de las escalas mediante ningún índice de inflación ni de salarios.

“Es una baja significativa en la carga tributaria”

“Esta medida apunta a generar una significativa reducción en la carga tributaria efectiva que aqueja a gran parte de contribuyentes”, dice la iniciativa, firmada por Prat Gay y el jefe de Gabinete, Marcos Peña.

Fuente: La Voz del Interior. http://www.lavoz.com.ar/politica/macri-propone-una-baja-gradual-en-tres-anos?cx_level=flujo_1