Presionado por el FMI, el Gobierno apura la aprobación del Presupuesto
Urgido por mostrar resultados antes de la reunión que el viernes tendrá el FMI para analizar la aprobación del nuevo acuerdo de salvataje con la Argentina, el oficialismo apurará este martes la firma del dictamen del Presupuesto 2019 comprometido con el organismo internacional con la intención de tratarlo en el recinto el miércoles en una sesión especial.
A cambio de la aprobación de la norma que conllevará un ajustazo en la economía real de los argentinos -según lo advirtieron los bloques opositores más duros en las sucesivas reuniones de la Comisión de Presupuesto de Diputados-, el Gobierno espera que el FMI apruebe el nuevo entendimiento para acceder a la ampliación de 7.100 millones de dólares del primer acuerdo stand by firmado en junio por U$S 50.000 millones, que le permitiría pagar los vencimientos de los intereses de la deuda de aquí hasta el final del mandato presidencial, siempre y cuando todas y cada una de las variables monetarias y económicas no empeoren.
Pero además, el macrismo se aseguraría el anticipo de 19.000 millones dólares que originalmente el organismo tenía previsto desembolsar en los años 2019 y 2020, que estarían disponibles entre este año y fines del año próximo, antes de las elecciones presidenciales de 2019.
Sin embargo, las intenciones del Gobierno de acelerar esta semana los tiempos de aprobación del Presupuesto en la Cámara baja aún están en duda. El peronismo “dialoguista” que participó de las intensas negociaciones que se llevaron a cabo la semana pasada en el palacio legislativo, que incluyó a ministros del Poder Ejecutivo, reclama mayores modificaciones al Presupuesto y sobre todo conocer antes los detalles del secreto nuevo acuerdo con el FMI para tomar una decisión final, le confió a La Nueva Mañana una fuente de ese sector político.
“Falta mucho trabajo para saber si habrá dictamen o no”
En el mismo sentido, se expresó ante este medio Marco Lavagna, principal espada económica del Frente Renovador en la Comisión de Presupuesto, que consideró que a pesar del apuro del Gobierno “todavía falta mucho trabajo para saber si van a tener dictamen o no” y señaló, entre los principales puntos aún por definir, “el tema del subsidio al transporte, las modificaciones a la Ley de Participación Pública Privada (contratos entre el gobierno y el sector privado para obras públicas), los súper poderes que se le otorgan el jefe de Gabinete” y también detalló los “aspectos que tienen que ver con la reestructuración de la deuda y cambios en el Código Aduanero”.
En tanto, la oposición del kirchnerismo quedó reflejada en la dura intervención que volvió a tener Axel Kicillof en la Comisión de Presupuesto del jueves pasado, cuando afirmó que el proyecto oficial es “un presupuesto de ajuste y de endeudamiento, de desindustrialización y antifederal, que no cambia porque cambie la alícuota de un impuesto” en referencia al proyecto complementario con dictamen que prevé cambios en el impuesto a los Bienes Personales (que podrían utilizarse para satisfacer las demandas en torno a la compensación extra a los municipios por el traspaso de los subsidios al transporte y para subsanar el ajuste en organismos nacionales como el Inta y en el área de Ciencia y Tecnología).
“Es el mismo Presupuesto, sólo que nos lo quieren hacer discutir en cuotas: están manoteando recursos para aplicarlo vaya a saber a qué”, agregó el diputado del Frente para la Victoria (FpV-PJ).
“Necesitamos que rearmen el Presupuesto: éste está mal y se niegan a abrirlo. Lo hicieron antes del acuerdo con el Fondo. Por eso ahora se tienen que sentar de nuevo con las nuevas instrucciones que les ha dado el FMI”, remarcó. “Este Presupuesto es invotable, es más desgracia”, aseguró Kicillof.
Los votos
La prioridad del Gobierno es el Presupuesto y en eso vino trabajando exclusivamente en esta segunda parte del año, en la que mantuvo inactivo el Congreso para evitar que la crisis contaminara sus planes. De esta manera, la premura del oficialismo de tener aprobada la ley de leyes este mes se aceleró la semana pasada con las múltiples reuniones que encabezó Emilio Monzó en sus oficinas de la presidencia de la Cámara de Diputados, de las que participaron ministros del Poder Ejecutivo Nacional y de economía provinciales, los titulares de los bloques y de la Comisión de Presupuesto oficialistas y legisladores justicialistas de Argentina Federal que responden a los gobernadores.
El martes concurrieron los ministros de Interior, Obras Públicas y vivienda, Rogelio Frigerio; de Educación, Cultura y Ciencia y Tecnología, Alejandro Finocchiaro; de Transporte, Guillermo Dietrich y el director de la Anses, Emilio Basavilbaso y los diputados del peronismo “dialoguista” con los ministros de Economía y Hacienda de sus provincias. En tanto, al día siguiente tuvo continuidad la reunión con la presencia del titular de cartera de Transporte.
Allí no lograron ponerse de acuerdo para firmar dictamen el jueves. Las dudas más grandes giraron en torno al tema del recorte de los subsidios al transporte y los fondos con que la Nación compensaría a las provincias. Pero esa no sería la única diferencia, persisten cuestionamientos en recortes presupuestarios puntuales en diversos sectores como el Conicet, las universidades y otros organismos nacionales. También con respecto al financiamiento de las Cajas Previsionales de las provincias y los avales para la continuidad de las obras públicas.
“Fondo de asistencia a los municipios”
Sin embargo, para despejar las dudas del justicialismo, el oficialismo consiguió dictamen del proyecto complementario de modificación del impuesto sobre los bienes personales que le permitiría aumentar la recaudación que promete utilizar para crear un “fondo de asistencia a municipios”, que manejaría el titular de la cartera de Transporte, Guillermo Dietrich, para afrontar el costo del traspaso de los subsidios al transporte público a las provincias y también para compensar los otros reclamos.
Mientras que para comprometer los votos de los legisladores que responden a los jefes provinciales la Comisión de Presupuesto también dio dictamen a otros dos proyectos, a la reforma del Pacto Fiscal y a la suspensión del ajuste por inflación de los balances de las empresas, como parte del acuerdo de la Nación con los gobernadores.
No obstante, las negociaciones entre los legisladores del oficialismo y de Argentina Federal por la letra aún más final del Presupuesto continuarán entre hoy y mañana, tras lo cual Cambiemos espera firmar dictamen y tratarlo el miércoles en sesión especial.
Aunque aún subsisten las discrepancias con la oposición que ponen en duda que el oficialismo consiga su objetivo, el presidente de la Comisión de Presupuesto, Luciano Laspina, confirmó a La Nueva Mañana (ver nota aparte) que cuentan con el apoyo de “muchos diputados del bloque Argentina Federal y creemos que hay otros bloques provinciales que darán su apoyo para la aprobación del Presupuesto”.
En tanto, en los números del oficialismo no cuentan con el Frente Renovador, cuyos diputados se abstendrían o votarían en contra, ni mucho menos del bloque del Frente para la Victoria – PJ. Con todo, el oficialismo espera sumar 27 votos de la oposición y alcanzar 134 votos para la aprobación de la norma.
Fuente: La Mañana. La Mañana