El recorte ya alcanza al 97% de los jubilados provinciales

A cuatro meses de iniciada la última reforma, ya casi todos los jubilados y los pensionados provinciales están alcanzados a pleno por el recorte que implica el recálculo de sus haberes.

El mes pasado, se sumaron los pasivos bancarios, que integran el sector más importante que todavía no había sido tocado, ya que no se había cerrado la paritaria de los activos.

Sólo quedan alrededor de 2.500 casos de pasivos de municipalidades del interior a los que, hasta ahora, se les aplicó un recálculo parcial, ya que tuvieron aumentos por debajo del 11 por ciento.

Ocurre que, según la norma que aprobó la Unicameral, el recorte no gatilla a pleno hasta tanto se produzca una movilidad de haberes tras la bisagra del 23 de diciembre pasado, cuando entró en vigencia el recálculo. Además, hay un piso que no se puede perforar: el haber cobrado en diciembre último.

Con esa estrategia, la quita del 11 por ciento queda “licuada” en el incremento de haberes, para atenuar el impacto y el malestar en los bolsillos de los jubilados.

El caso de los bancarios es un buen ejemplo reciente: los activos tuvieron un aumento, retroactivo a enero, del 33 por ciento. Esa suba contagió una movilidad, también desde enero, pero de 18,37 por ciento para los pasivos.

El último Informe de Movilidad del ente previsional indica que, con el pago de abril, “los exempleados del Banco de Córdoba verán incrementados sus haberes en casi 4.979 pesos, llevando el haber medio del sector a 32.161 pesos en abril de 2016”.

La interventora de la Caja, Mariela Camporro, señaló que una estimación preliminar sobre ingresos (aportes y contribuciones) y egresos (jubilaciones y pensiones) bancarios, con el aumento, arroja un déficit sectorial de 39 millones de pesos entre enero y abril.

La ley 10.333, que modificó la manera en la que se calculan los haberes, disparó miles de reclamos administrativos ante el organismo previsional.

Al viernes pasado, se habían acumulado 5.000 casos, la mayoría impulsados por estudios de abogados para agotar esa vía y poder recurrir a la Justicia ordinaria.

Ello porque los recursos de amparo que se habían presentado apenas se aplicó el recorte fueron rechazados por el fuero Contencioso Administrativo, al considerar que sólo son admisibles ante la “inexistencia de otros recursos judiciales más idóneos”.

Por fuera de esas quejas, hay otros 700 reclamos cursados en la Caja, de los cuales 500 corresponden a jubilados bancarios que piden ser alcanzados por 
el bono de 5.500 pesos que los activos del sector cobraron en enero.

Sin embargo, el área de Legales del ente y técnicos de la Fiscalía de Estado consideraron que ese pago fue extraordinario y, por lo tanto, no está integrado al haber mensual.

Desde fines de diciembre, la Caja de Jubilaciones modificó la manera en la que calcula los 
haberes. Al tomar como referencia el salario activo, ya no considera el 82 por ciento móvil del bruto (sueldo total sin descuentos), sino que aplica un nuevo parámetro.

Ese valor arranca con un descuento del 11 por ciento, por lo que en lugar del salario bruto pleno, el cálculo se hace a partir del 89 por ciento de ese sueldo. En la práctica, entonces, implica pagar el 73 por ciento del salario bruto activo.

El Gobierno argumentó que el recálculo no viola el “núcleo previsional” que fijó el Tribunal Superior de Justicia en 2009 en el caso Bossio, cuando resolvió como última frontera el 82 por ciento del sueldo líquido o neto (después de los descuentos), lo que en la jerga se conoce como el 82 del 82 (67 por ciento del 
bruto).

La otra espada legal del Ejecutivo es la ley en sí misma, que fue aprobada por la Unicameral para modificar la normativa previsional, a diferencia de lo que ocurrió con el recorte del exgobernador Ramón Bautista Mestre, que podó el 18 por ciento a través de un decreto (1.777 de 1995).

La constitucionalidad del recorte está ahora en manos del Tribunal Superior, tras un planteo realizado por el exgremialista bancario Miguel Acosta, patrocinado por el abogado Jorge Gentile, y sobre el cual se montó luego la Unión del Personal Superior (UPS).

Cómo es el recálculo

En diciembre, la Caja de Jubilaciones modificó la manera en la que calcula los haberes jubilatorios. Al tomar como referencia el salario activo, ya no considera el 82 por ciento móvil del sueldo bruto. En la práctica, implica pagar el 73 por ciento del salario bruto activo.

97 mil beneficios

Liquidación. La Caja de Jubilaciones liquidó en abril 97.053 beneficios por un total de 1.838,6 millones de pesos, lo que arroja un promedio simple de 18.944 pesos de haber promedio por cada jubilado/pensionado. Por cierto, hay jubilados que cobran por debajo de esa cifra y otros, por encima.

Distribución. El 22 por ciento de los beneficiarios percibe más de 24 mil pesos mensuales, mientras que 20 por ciento de los pasivos cobra entre 15 mil y 20 mil pesos. Luego está la escala de 12 mil a 15 mil pesos, que abarca al 18 por ciento. En otras palabras, la mitad más uno percibe por encima de 15 mil pesos mensuales, en una escala que llega a picos de 100 mil pesos.

Promedio. Tras los aumentos de abril, la jubilación promedio que paga el sistema superó los 20 mil pesos.

Fuente: La Voz del Interior. http://www.lavoz.com.ar/politica/el-recorte-ya-alcanza-al-97-de-los-jubilados-provinciales?cx_level=flujo_1