La protesta callejera contra el G-20 se concretó sin incidentes
Un heterogéneo y colorido conglomerado de agrupaciones políticas y sociales marchó ayer en protesta contra la cumbre del G-20. La multitud, cuyo grueso se identificó principalmente con partidos de izquierda, salió desde el barrio de Constitución para terminar en el vallado de seguridad apostado frente al Congreso.
La caminata de unas 20 cuadras se desarrolló bajo la mirada de cientos de gendarmes y de grupos de infantería de la Policía federal con la colaboración de la fuerza porteña.
“Confluencia Fuera el G-20 y el FMI” agrupó, entre otras organizaciones, al Servicio de Paz y Justicia, de Adolfo Pérez Esquivel; Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, las organizaciones sindicales CTA Autónoma y ATE Capital, movimientos sociales como la CTEP, Barrios de Pie, el Movimiento Evita y la Corriente Clasista Combativa, y partidos políticos entre ellos el PO y el PTS, integrantes de Izquierda Unida y el MST. Ni el Partido Justicialista ni las distintas organizaciones kirchneristas como La Cámpora o Nuevo Encuentro movilizaron sus estructuras. Tampoco participaron los grandes aparatos del sindicalismo clásico.
El Frente de Izquierda, antes de sumarse a la marcha, realizó su propio acto, con la presencia de los legisladores Nicolás del Caño y Myriam Bregman, y del dirigente del Partido Obrero, Néstor Pitrola.
“Nosotros marcamos una diferencia con los organizadores; creemos que los gobiernos supuestamente populares como los de Lula, Correa, Chávez o los Kirchner pavimentaron el camino para la llegada de la derecha”, puntualizó Pitrola en charla con La Voz.
“Fuera Trump y todos los líderes imperialistas” fue una de las consignas reiteradas desde los parlantes del camión que encabezó la marcha. En la primera fila marchó la madre de Plaza de Mayo, Nora Cortiñas, de 88 años. A su lado, la protegió del sol con un paraguas verde, la activista internacional, Beverly Keene.
Cerca de ellas caminó el economista y exdiputado nacional, Claudio Lozano. “El G-20 nos dejará un Estado militarizado, que gastó tres mil millones de pesos en armas, ropas y equipamiento para las fuerzas de seguridad”, afirmó en una crítica a la seguridad.
Antes de la movilización fueron detenidos dos dirigentes del PTS (el partido de Del Caño y Bregman), uno de ellos, Guillermo Pistonessi, apoderado nacional partidario. También fueron detenidos seis militantes de movimientos sociales.
Los pequeños grupos anarquistas locales no pudieron reeditar las violentas jornadas de protestas callejeras que hubo en la reunión del G-20 en Hamburgo, en julio del año pasado. Ayer, en un momento, hubo forcejeos entre anarquistas y militantes de izquierda.
Rechazo callejero
Bajo control. La manifestación en contra de la cumbre de líderes mundiales tuvo como epicentro la zona del Congreso Nacional. La protesta estuvo dentro de los carriles normales: no hubo incidentes.
Fuente: La Voz del Interior. La Voz del Interior