La UCR empuja a una nueva interna en el macrismo cordobés
El pasado fin de semana tomó forma el mapa definitivo de cara a las elecciones primarias del 11 de agosto. Luego de intensas discusiones que como siempre llegaron al filo de la medianoche, el Frente Despertar, que lleva como candidato a presidente a José Luis Espert se oficializó como una de las fuerzas que utilizará las PASO para determinar los nombres de los aspirantes que disputarán la elección general de octubre. La otra interna tiene como protagonista, otra vez, a la Unión Cívica Radical.
A pesar de que las fuerzas del macrismo cordobés expresaron sus intenciones de llegar a una lista de consenso, las diferencias de criterios en la amplia aldea del radicalismo provincial terminaron por generar un nuevo escenario de internas que se deberá resolver en poco más de un mes.
Lo dicho
Durante la primera parte del año 2018, Unión por Córdoba impulsó una norma que modificó la ley electoral y habilitó la doble candidatura del aspirante a gobernador, quien también pudo ocupar el primer lugar de la lista de candidatos a legisladores provinciales. Esa normativa, durante la campaña, generó una serie de movimientos proselitistas que derivó en un compromiso público por parte del entonces precandidato a gobernador del macrismo: Mario Negri.
Sumergido en la interna que lo enfrentaba a Ramón Mestre, el diputado llegó a comunicar un compromiso público que proponía que aquellos aspirantes a la gobernación no aspirarían a cargos nacionales en la compulsa de octubre. De esa manera, Negri cuestionaba a Schiaretti pero también advertía un movimiento al interior de su propio partido. Puertas adentro, tanto su sector como el mestrismo acusaban a su competidor de presentar la disputa interna para conseguir “algo más”. Ese interés extra, aunque no se haya dicho en voz alta, era la candidatura a la vicepresidencia de la República. Con los resultados de mayo, el nombre de Negri perduró un poco más tiempo que el de Mestre. Pero el lugar fue finalmente para un peronista: Miguel Ángel Pichetto.
Lo hecho
El actual titular del interbloque oficialista en la Cámara baja reiteró la idea a lo largo de toda la campaña, pero parece que el devenir de los acontecimientos terminaron por hacerlo cambiar de opinión.
El hombre que este año terminará su quinto período como diputado nacional será la cabeza de una lista en la que el radicalismo tiene un segundo lugar expectante en la figura de Hugo Romero, el actual secretario de Economía y Finanzas de la Municipalidad, que ocupa ese lugar en representación del mestrismo. El armado en el que también jugaron fuerte las referencias locales del PRO, la Coalición Cívica y el juecismo (el propio Juez será candidato) dejó afuera a algunas de líneas internas del partido centenario que, aisladas de la discusión, decidieron ofrecer una alternativa por fuera de la lista “del consenso”.
La interna
Uno de los principales opositores al armado que nuclea a ese armado acordado por las conducciones de los partidos que hoy integran Juntos por el Cambio es Miguel Nicolás.
El actual legislador provincial asegura que la lista (tal como acusaba el mestrismo durante las elecciones provinciales) fue armada directamente en las oficinas porteñas, que es el lugar en el que se cuecen habas en lo que al macrismo respecta. “Se repartieron los cargos entre los partidos y los radicales cordobeses ya hemos dicho que queremos tomar nuestras propias decisiones”, asegura. Según sus palabras, el único objetivo que persigue en esta nueva discusión interna es la de volver a poner en valor la fuerza del partido a nivel provincial e insiste que, en su modo de ver las cosas, la Convención Nacional habilitó a las diferentes expresiones partidarias para disputar al interior de la alianza electoral que acompañará a Mauricio Macri en sus intenciones reeleccionistas.
“En esa lista acordada en Buenos Aires, entre los primeros seis puestos hay un solo referente del interior, los demás son todos de la capital. En la nuestra, de los seis primeros, cinco son del interior y tan sólo uno es de la capital”, afirma poniendo en valor el armado que reconoce como territorialmente representativo.
También destaca la participación de las diferentes corrientes radicales al interior de su lista y para ello refiere a sus dos principales acompañantes: Carla Carta, una dirigente enrolada en el becerrismo del departamento San Justo y Luis Brouwer de Koning, un histórico del departamento Tercero Arriba.
Además de las corrientes que adhirieron al armado “de consenso” otra de las expresiones que Nicolás no logró sumar es el que representa Javier Fabre, quien encabeza la tercera lista que participará en las PASO de Juntos por el Cambio.
“Nosotros sabemos que las PASO son una oportunidad para representar a una parte de la ciudadanía a la que nuestro espacio no está pudiendo llegar”, señala Fabre quien destaca el aspecto generacional como uno de las motivaciones centrales para la participación en la interna.
“Nuestra lista es un armado transversal a toda la estructura partidaria. Tenemos un enorme respeto por los dirigentes que están los otros espacios y, de hecho, muchos de nosotros hemos crecido aprendiendo de ellos, pero es una injusticia seguir cargándolos de responsabilidades. En las elecciones provinciales quedó claro que la juventud es uno de los sectores al que a Cambiemos más le costó interpelar, nosotros trabajamos para incorporarlos a la agenda y en ese pondremos nuestro esfuerzo en este mes que queda para la elección”, afirma el candidato del espacio que lleva el nombre Somos Renovación.
Las tres listas están oficializadas en la Justicia. El capítulo siguiente de esta historia será la campaña, que puede subir de intensidad si es que la Justicia no habilita a las dos listas puramente radicales para “pegar boleta” con las candidaturas nacionales de Mauricio Macri y Miguel Ángel Pichetto.
Fuente: La Mañana. La Mañana