Los legisladores jubilados cuestan casi el triple que la Unicameral actual
Aunque suene ilógico, a Córdoba le sale casi el triple mantener a sus legisladores jubilados que pagarles los sueldos a los parlamentarios que están actualmente en actividad.
Para cumplir con nuestros 162 exrepresentantes ya jubilados, hay que abonarles 12 millones de pesos al mes. Pero esa cifra se dispara a 19,3 millones si se agregan los 124 pensionados.
En cambio, el Estado gasta unos 7,3 millones de pesos mensuales en los salarios y aportes de los 70 legisladores de hoy.
Una de las causas que subyacen a este fenómeno es que, en 2001, el Poder Legislativo pasó de tener un sistema bicameral a adoptar uno de carácter unicameral. Y eso redujo en forma notoria la cantidad total de bancas: pasaron de 133 a 70. Por lo tanto, se achicó la cantidad de aportantes.
Pero hay otra razón que explica esta situación, no menor, que se desprende de las condiciones que tenía el régimen jubilatorio antes de las reformas previsionales concretadas entre 2002 y 2008.
Si bien había parámetros que se aplicaban por igual para todos, en el caso de los legisladores el cálculo del haber se podía hacer a partir del cargo electivo que habían ocupado en su vida laboral.
Eso dio lugar a situaciones que, si bien eran legales, aparecen como irracionales. Por ejemplo, alguien que en determinado momento incursionó en la política y fue senador o diputado provincial se podía jubilar con sólo 10 años de aportes al sistema local y tomando como referencia el salario que había cobrado como legislador, actualizado.
Esa posibilidad, que estaba prevista en el inciso G del artículo 50 de la vieja ley previsional 8.024, fue aprovechada por el 56 por ciento de los legisladores jubilados. Y el 47 por ciento de las pensiones del sector derivan también de esa situación.
Otros, en cambio, optaron por el inciso F de ese mismo artículo, que permitía tomar como base para calcular el haber jubilatorio el sueldo cobrado en el mejor cargo ocupado en la vida laboral.
Si bien esas ventajas se derogaron y hubo reformas paramétricas, las condiciones legales del momento se tradujeron en haberes cuyos efectos todavía laten en el gasto público.
Cuántos y cuánto
A pedido de La Voz del Interior , la Caja de Jubilaciones elaboró un informe que abarca a los pasivos que tuvieron cargos electivos, es decir, que en algún momento de nuestra vida democrática fueron ungidos por el voto como representantes.
En ese detalle, hay 66 exsenadores y 83 exdiputados del viejo sistema bicameral y 13 exlegisladores del actual modelo unicameral. Todos ellos cobran, en promedio, jubilaciones de casi 74 mil pesos brutos, con picos que superan los 89 mil pesos.
Hay además 124 pensiones con un beneficio promedio, en bruto, de 59 mil pesos, que son percibidas por cónyuges de exlegisladores y exlegisladoras.
En esos valores, no se contemplan los descuentos por el Impuesto a las Ganancias. En el caso de los jubilados, el impacto promedio del tributo es de 23.800 pesos, por lo que el haber medio final se ubica en 50 mil pesos, no lejos de los sueldos de bolsillo que perciben los legisladores en actividad.
Más de la mitad de los exparlamentarios se jubiló antes de 2002, cuando se armonizaron las edades con el régimen nacional. El pico de pases ocurrió con las jubilaciones anticipadas.
Reformas
En 2009, la Caja de Jubilaciones elaboró un informe que incluía el listado de los beneficios obtenidos en condiciones de “privilegio”.
El documento provocó una fuerte reacción de los pasivos que figuraban en él. Un año antes, el organismo había completado un proceso de reformas que había arrancado en 2002.
A Sergio Busso, actual ministro de Agricultura, le tocó participar en 2008 de una sesión caliente, con los gremios que protestaban en la calle, ya que el Gobierno había aprovechado para meter en la misma bolsa la declaración de la emergencia previsional y el pago con títulos de parte de los haberes más altos.
“Si un legislador es igual que un ciudadano común, un funcionario no tenía por qué tener un régimen especial para jubilarse”, considera hoy. “Me parece que, visto desde la modificación, eran privilegios o regímenes especiales que había que ver si tenían fundamentos o no. Nuestra posición fue acompañar para que el régimen previsional fuera más sustentable en el tiempo”, dice el exlegislador oficialista.
En la vereda contraria estuvo aquella vez, entre otros, Roberto Birri, que entonces ocupaba una banca por el juecismo (Frente Cívico).
“Yo voté en contra porque, en comparación con la ley vigente hasta ese momento, había una situación de perjuicio para quienes se jubilaban de allí en más. Se violentaban derechos adquiridos”, recuerda hoy Birri.
El dirigente socialista admite que en la norma previa “había artículos que generaban condiciones de excepción a las generales de la ley”, pero insiste en que la reforma legal “fue perjudicial” en términos generales.
Con aquella reforma, se derogó la posibilidad de calcular el haber jubilatorio sólo a partir del cargo electivo o del mejor cargo (por ende, el mejor sueldo) de la vida laboral.
También se dejó de lado el beneficio de contabilizar, como años de aporte, los servicios fictos o prestados ad honorem, que se tomaban a partir de moratorias. Ejemplo: un exlegislador que cumplía la edad para retirarse pero que no había hecho suficientes años de aportes podía acreditar que había trabajado sin cobrar (por caso, como asesor legislativo) con una mera declaración jurada. Con sólo pagar los aportes de esos años a través de una moratoria, se jubilaba.
Otro cambio clave fue la definición de la “caja otorgante” de la jubilación. Ahora, se hace cargo la Caja que mayores aportes recibió durante la vida activa de quien se jubila. Pero, antes, el que se jubilaba elegía la Caja. Obviamente, todo el mundo optaba por la de Córdoba, por los amplios beneficios y privilegios que otorgaba. Ahora hay que jubilarse en la Caja en la que se aportó más.
También se fijó, como regla general, que el haber básico se calcula a partir del promedio de los últimos cuatro años de servicios. En el régimen nacional, son los últimos 10, razón por la cual los haberes tienden a ser menores que en la Provincia.
Fuente: La Voz del Interior. http://www.lavoz.com.ar/politica/por-que-los-legisladores-jubilados-cuestan-casi-el-triple-que-la-unicameral?cx_level=principal