Policiales

Periodismo: La noble tarea de construir ciudadanía

Las prácticas sociales de cada uno de nosotros están atravesadas por el desarrollo de la tecnología que media y ocupa un lugar neurálgico en todo el proceso de vinculación humana.

Desde la segunda mitad del siglo pasado, especialmente en las últimas décadas, a esta parte, el mundo entero ha sido testigo de un proceso multicausal sin precedentes a lo largo su historia y que tiene que ver con el firme desarrollo de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (NTIC´s).

Estos avances, que en sus orígenes se plantearon como proyectos de conectividad y vigilancia global al servicio de los organismos de defensa de los países desarrollados han llegado a la cotidianidad de los días y de cada ciudadano, plasmando profundos cambios en la forma en como las personas interactúan con los demás y en cómo adquieren conocimiento y fundamentalmente en como llevan a cabo sus actividades en cualquiera de los ámbitos donde se relacionen: sociales, profesionales, laborales, etc.

Desde esta perspectiva, el periodismo no ha estado al margen de estos profundos cambios y desde sus orígenes se ha constituido como una de las actividades de mayor responsabilidad colectiva, garantizando los valores democráticos y permitiendo echar luz sobre aquellas acciones que equilibran la necesaria accesibilidad e inclusión de derechos y el cumplimiento de nuestras obligaciones como ciudadanos.

La era de la digitalización también introdujo cambios en el periodismo, como en todas las prácticas, no obstante, lejos de opacar su protagonismo en la estructura de nuestras comunidades, ha venido a revalorizar el rol de la profesión en virtud de los comportamientos y respuestas de los nuevos públicos.

La posibilidad de realizar transmisiones en vivo o registrar un hecho de manera instantánea desde cualquier dispositivo a través de multiplataformas o las redes sociales, ha convertido a aquel receptor pasivo unidireccionado al que se consideraba que se le hablaba en el inicio del estudio de las teorías comunicación, en un “prosumidor” del hecho noticioso que contribuye a la construcción de sentido del entorno donde se sustenta su identidad.

En ocasiones, la primicia se impone por nuevos canales informales y ante esto, los trabajadores de prensa y los medios de comunicación tradicionales, cobran aún más relevancia.

En estos nuevos escenarios virtuales en donde se hace imperioso redefinir las nuevas categorías de espacio y tiempo, son los periodistas y los Medios de Comunicación aquellos garantes indispensables de la verdad; permitiendo, a través de las buenas prácticas profesionales, el necesario acceso a la información y a la argumentada y responsable interpretación ética de la realidad.

Allí radica, una de las funciones primordiales del periodista, a las ya reconocidas capacidades informativa, educativa y de entretenimiento, promover las voces de todos los que conforman una comunidad permitiendo una representación integral y contribuyendo a la libertad de expresión, pilar central para el fortalecimiento de la democracia.

En esos contextos difíciles donde la abundancia informativa, puede llegar a mezclarse con noticias no verídicas, reparamos siempre en el periodista quien aporta claridad, profesionalidad y responsabilidad.

¡En el Día del Periodista mi reconocimiento a cada uno de quienes lo ejercen con pasión y profesionalismo!

Nota publicada también en: El Diario del Centro del País (Villa María)

(*)Licenciando en Comunicación Social – Mgter. en Gestión Política (UCC) – Secretario de Comunicaciones de la Provincia Docente UNVM.