Crisis de ingresos: la Provincia exprime el Impuesto Inmobiliario
La caída de los ingresos de la Provincia no es novedad. La recaudación del Centro Cívico comenzó el camino de la retracción a mediados de 2018, en medio de la serie de devaluaciones del gobierno de Cambiemos, y la pandemia no ha hecho otra cosa que potenciarla.
En ese escenario, con el año en la recta final y el nivel de actividad sin repunte (algo clave para los ingresos del Panal), una de las únicas llaves que puede darle una mínima cuota de oxígeno a las cuentas de Juan Schiaretti es el Inmobiliario. En rigor, no el impuesto en sí, sino el recálculo de la base imposible a partir de mejoras no declaradas por los contribuyentes.
Así es, más allá de que el dueño de un inmueble haya pagado la cuota única o adherido a alguna de las modalidades de cancelación en cuotas a comienzos de año, es posible que tenga una novedad más para pagar: las cuotas 81, 82 y/o 83.
Los códigos corresponden a revalúos catastrales que Rentas carga a partir de informes que le envía la Dirección de Catastro. Se trata –fundamentalmente– de la detección de mejoras en los inmuebles que no fueron declaradas voluntariamente por los propietarios.
Son metros cuadrados que Catastro identifica con el cotejo de imágenes previas y actuales, dejando en evidencia la construcción de ampliaciones, piletas, galerías o quinchos.
Con esos datos en la mano, Rentas luego aplica el diferencial del impuesto del 2020 y, en algunos casos, con retroactividad. Esto último, para el caso de que el organismo pueda identificar desde cuándo el inmueble está en infracción.
La herramienta no es nueva, pero desde el año pasado los casos se están multiplicando a partir de un entrecruzamiento mucho más riguroso en busca de exprimir al máximo las posibilidades de recaudar por los metros que realmente están construido en Córdoba.
Además, algo importante: el valor de los recálculos se ven potenciados porque están incorporados los datos obtenidos en el último estudio territorial inmobiliario. Por ese análisis en base a técnicas de geoestadística, se ajustaron fuertemente las valuaciones fiscales (hoy están en cerca del 65 por ciento del valor de mercado).
“Rentas te informa que en razón de la nueva edificación verificada por Catastro, el impuesto correspondiente a tu inmueble ha sido recalculado”, dice el correo electrónico enviado a los contribuyentes. Y agrega: “Los saldos son por única vez, figuran en la web como ‘cuota 81, cuota 82 y cuota 83’ y están agrupados en ‘adicional por nueva edificación”.
El nombre de las cuotas tiene que ver con un código interno que Rentas usa para identificar diferentes tipos de factores que desembocan en la generación de la deuda, que “se puede pagar con un plan de pagos, sin recargos ni intereses”, dice el envío.
En Rentas Córdoba, con la identificación del inmueble, se puede saber si se generó la Cuota 81/82/83.
Si no está de acuerdo con la información que relevó la Provincia, puede hacer el descargo en Catastro Córdoba.
Patrimoniales
En 2017, el Estado provincial lanzó un plan de regularización de metros de construcción sin penalidades ni retroactivos con la idea de darle la posibilidad a los contribuyentes de “sincerar” su situación. Luego, aplicó el revalúo.
El objetivo es potenciar la participación del Inmobiliario en el concierto de impuestos que recauda o que recibe como parte de la coparticipación. Se busca dejar de depender tanto de los tributos que gravan la actividad.
El volumen de ingresos extra que se produjo en 2017 con el amplio plan de sinceramiento fue de unos 130 millones de pesos (de ese año), producto de la declaración voluntaria de más de 3,2 millones de metros cuadrados. Un 68 por ciento (2,19 millones de metros cuadrados) fueron ampliaciones y el resto (1,03 millones de metros), construcciones nuevas.
Fuente: La Voz del Interior. La Voz del Interior