Clases: el secundario se reorganizará casi por completo
A pocos días del reintegro de los docentes a las escuelas, el Ministerio de Educación envió, el miércoles pasado, a los equipos directivos el protocolo sanitario para el retorno a clases y adjuntó una serie de propuestas de reorganización escolar bajo el formato bimodal (presencial y remoto).
El documento que marca los lineamientos de funcionamiento de la escuela en la llamada “nueva normalidad” no es el definitivo y el texto advierte, de manera expresa, que está sujeto a revisión.
Se trata de los acuerdos a los que han llegado los equipos técnicos ministeriales. Luego, cada escuela deberá adaptar estas pautas a su propia realidad y contexto.
Los ejes de la propuesta avanzan en las siguientes ideas: el retorno a clases será el 1° de marzo en su formato mixto, con presencialidad total o alternada (una semana si y otra no), en grupos de no más de 15 alumnos, en jornadas escolares de cuatro horas reloj o seis horas cátedra (30 horas cátedra semanales) y con un formato de asignaturas troncales y talleres integradores, que incluirán las materias artísticas y de expresión corporal (educación física y música, entre otras).
El instructivo insta a que las “escuelas grandes” de más de 600 alumnos prioricen el retorno de los estudiantes del primer año y el del último (sexto en Ciclo Orientado y séptimo, en técnicas).
Por supuesto que el retorno a clases, después de un año de escuelas cerradas a raíz de la pandemia por el Covid-19, se realizará bajo estricto protocolo, conforme a la relación entre espacios en las aulas y matrícula (aforo) y las condiciones epidemiológicas y sanitarias.
Habrá horarios estrictos de ingreso y egreso y “burbujas” bien identificables que no superen los 15 alumnos. Se sugiere que la reapertura sea paulatina, progresiva y rotativa.
Propuestas pedagógicas
Las propuestas pedagógicas podrán ser con formato bimodal, con o sin alternancia semanal, y con la integración de asignaturas o espacios curriculares, lo que requerirá de un trabajo colectivo y articulado entre docentes y directivos
El Ministerio promueve que se sigan priorizando los contenidos fundamentales, en el marco de la “unidad pedagógica 2020-2021”.
Es decir, que no será posible ver los programas completos de cada materia, después que el año pasado se unificara el ciclo lectivo con el de este año y quedaran numerosos temas pendientes.
Esto implicará una planificación completamente distinta, donde habrá que incorporar conocimientos que no se dieron en 2020 e intentar sumar los que corresponden a 2021.
Se establece, además, un dispositivo de evaluación formativa. Aunque no se dan precisiones, este tipo de evaluación pretende seguir el proceso de aprendizaje de los alumnos de manera continua, algo que fue muy difícil de implementar con la educación remota.
Con respecto al abordaje, la Dirección de Educación Secundaria propone que en la bimodalidad la planificación se oriente al desarrollo de Proyectos de Aprendizajes Integrados (PAI).
A fines del año pasado, las escuelas hicieron un ensayo de PAI para que los alumnos de sexto año pudieran concluir la secundaria.
Los equipos docentes y directivos, además, presentaron antes de Año Nuevo su proyecto de integración de los contenidos para que los alumnos de la promoción 2020, que quedaban con asignaturas pendientes, pudieran cerrar el ciclo a partir del 19 de febrero.
En relación a las escuelas que por cuestiones de espacio o de matrícula tengan que optar por una presencialidad con alternancia semanal, las autoridades sugieren que incorporen actividades remotas en la planificación para el tiempo en el que los estudiantes no asisten al aula.
Trabajo docente
El documento ministerial indica la necesidad de conformar equipos para el desarrollo de los PAI y distribuir entre los docentes las actividades pedagógicas presenciales y no presenciales.
Los educadores en grupo de riesgo, deberán incorporarse a un equipo y asumir tareas que puedan desarrollar de manera remota.
Los profesores con horas institucionales, a su vez, tendrán que colaborar en la planificación de los proyectos y acompañar a los estudiantes en sus procesos de aprendizaje.
Organización
Los encuentros presenciales y remotos sincrónicos serán acordados entre el equipo directivo, preceptores y docentes y los estudiantes deberán recibir información clara sobre los días, horarios y espacios a los que deberán asistir.
La actividad presencial durará cuatro horas reloj por día, divididas en tres módulos de 80 minutos (seis horas cátedra) para el trabajo en el aula. Habrá dos recreos de 15 minutos.
Se prevé que el ingreso sea escalonado. Para ello se conformarán subgrupos que entrarán con una diferencia de 15 minutos.
Los establecimientos que cuenten con una matrícula inferior a 600 estudiantes deberán organizarse de tal manera que cada división no supere los 15 alumnos. En caso de superarse, se conformarán “comisiones” y tendrán que prever la alternancia semanal de los grupos.
Las escuelas urbanas, con más de 600 alumnos también tendrán como límite los 15 alumnos por aula, con la posibilidad de desdoblamiento. En este caso, el aforo del edificio es clave para poder cumplir con el protocolo sanitario.
Estas instituciones con matrícula numerosa deberán priorizar la asistencia presencial de estudiantes del primer y último año. “Si las condiciones sanitarias lo permiten, se podrá convocar progresivamente a otros cursos”, indica el documento ministerial.
Para el resto de los cursos se insta a ofrecer clases virtuales con actividades asincrónicas y sincrónicas hasta que sean incorporados a la presencialidad.
Asignaturas y talleres
El Ministerio de Educación sugiere algunos formatos escolares, sujetos a cambios y modificaciones, en los que convivan los espacios curriculares troncales con talleres integradores con una carga horaria presencial de 30 horas cátedra semanales (cuatro horas reloj o seis horas cátedra).
Se cita un ejemplo posible (no único) de organización. En el Ciclo Básico: Lengua cinco horas cátedra semanales; Matemáticas, cinco; Inglés, tres; Ciencias Sociales (incluye Ciudadanía y Participación además de Historia y Geografía), seis; Ciencias Naturales (Física, Química y Biología), seis; Educación Tecnológica (en tercer año se incorpora Formación para la vida y el trabajo), dos y talleres de expresión artística corporal, tres.
En el Ciclo Orientado: Lengua, cuatro horas; Matemática, cuatro; Inglés, tres; Ciencias Sociales (en quinto año incluye Psicología junto a Historia y Geografía y en sexto año, Ciudadanía y Política y Filosofía), cinco; Ciencias Naturales, cuatro.
A eso se suman el proyecto integrado de la orientación: ocho horas para cuarto año; 11 horas para quinto y 14 horas para sexto. Dos horas para el taller Expresión Artístico Corporal,
Aún no está definida la grilla con las materias que corresponden a cada una de las 10 orientaciones.
Cronograma escolar
17 y 18 de febrero. Reincorporación de los docentes. Taller para el diseño del Plan Pedagógico Institucional (PEI).
Del 19 al 26 de febrero. Reuniones con las familias para presentarles los lineamientos del año.
19 de febrero. Inicio del “período de intensificación de aprendizajes” para aquellos alumnos que quedaron con temas pendientes. Estudiantes de sexto año: presencial; el resto de los cursos, de manera remota.
Del 22 al 26 de febrero. Período de exámenes.
1° de marzo. Inicio de clases para todos los niveles.
Fuente: La Voz del Interior.