Adultos mayores reciben especial atención durante la emergencia sanitaria
La infección por el Covid-19 afecta de manera más grave a la población de adultos mayores de más de 60 años, y en este sentido los residentes en centros de atención de larga estancia como lo son los geriátricos y hogares que albergan a personas mayores, constituyen un grupo de población vulnerable, predispuestos a desenlaces adversos e infecciones al convivir en estrecha proximidad con otras personas. Es por ello que en dichas instituciones resulta imprescindible adoptar precauciones especiales para proteger a sus residentes, empleados y visitantes.
La comunidad médica no duda en señalar que el virus Covid-19 es muy agresivo para los adultos mayores con un alto poder de contagiosidad, es por esto que el municipio lleva adelante medidas que permitan preservaros de posibles contagios.
San Francisco cuenta con 22 residencias de adultos mayores, en total 338 residentes y cerca de 150 personas que los acompañan
Con la finalidad de cuidar a este sector tan vulnerable, la municipalidad de San Francisco, a través de la Secretaría de Salud, decidió priorizar la vacunación antigripal a este grupo en una primera fase, donde se trasladaron los profesionales de la Asistencia Pública a cada uno de los geriátricos de la ciudad para ejecutar esta medida inicialmente.
Asimismo, siguiendo con los protocolos especiales emitidos por la provincia de Córdoba para estos espacios y con la finalidad de tener cuidados muy específicos para disminuir al máximo la posibilidad de contagios, se viene llevando a cabo un trabajo conjunto entre el municipio, las autoridades del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) regional, los directivos de la residencia “Diehl de Sienra”, del hogar de ancianos “Enrique J. Carrá” y demás geriátricos de la ciudad.
Cabe destacar que el protocolo para estos lugares es supervisado por el equipo citado y se programa un esquema de hisopados para el personal que atiende a los abuelos y las abuelas de nuestra ciudad. Entre los principales puntos que se detallan en el protocolo se destacan medidas de prevención tanto para los residentes como para quienes cumplen labores en estos establecimientos, como por ejemplo restringir el ingreso a familiares y a toda persona ajena a personal de planta o servicios; garantizar una forma alternativa de comunicación de los abuelos con sus familiares mediante videos-llamadas o telefónicamente; postergar, durante la emergencia, el ingreso de nuevos residentes a los geriátricos salvo casos excepcionales; la colocación de carteles informativos sobre higiene de manos e higiene respiratoria en la entrada de los centros, recepciones y otros espacios comunes; asegurar la disponibilidad de alcohol en gel y/o puntos de lavado de manos con agua y jabón en entradas/salidas/áreas comunes, para favorecer la higiene de manos frecuente, entre otros. Además, se acordó con los servicios de emergencias médicas para que actúen según las pautas del COE prehospitalario en los cuidados ante la necesidad de asistir a las diferentes residencias.