Buscaban a un ladrón, encontraron a un narco
“Generalmente, y como dicen en la jerga ellos, ‘son de distinto palo’. Pero en los últimos tiempos eso cambio: muchas veces vamos a un buscar a un ladrón y encontramos a un narco”. Quien habla es Calixto Luna, el jefe de investigaciones criminales de la Policía de Córdoba. Y se refiere así a la detención de Juan Carlos Díaz, de 32 años, buscado por ser sospechoso de tres violentos robos en los últimos 45 días y atrapado con cinco kilos de cocaína y pasta basa y 10 kilos de precursores.
Un equipo táctico del Eter, el cuerpo de elite de la Policía, irrumpió en una sencilla casa de barrio Cooperativa Los Paraísos. En la cama encontró durmiendo a quien buscaban: Díaz es sospechoso de perpetrar al menos tres violentos robos, y en dos actuó junto a cómplices. Los investigadores esperaban encontrar lo que encontraron: armas. Cinco pistolas fueron secuestradas de la vivienda.
“No teníamos indicios de la droga, sí de las armas”, cuenta Luna al relatar algunos detalles del operativo que comenzó con la búsqueda de un ladrón pesado y terminó con la detención de un narco importante. La investigación por los robos y la tenencia de armas seguirá bajo la órbita de la Justicia provincial, mientras que la causa por narcotráfico seguirá su curso en la Fiscalía federal que comanda Enrique Senestrari, la que deberá determinar el origen de la cocaína, la pasta base y los precursores.
La sospecha es que en la casa de Cooperativa Los Paraísos funcionaba un “centro de distribución” de mediana escala, que proveía a “quioscos”. Eso surge del modo en que la droga estaba fraccionada: en paquetes de 100 gramos cada uno. Por no tratarse de “narcomenudeo” la causa fue girada al fuero federal.
La hipótesis es que la cocaína llegaba a esa casa desde un lugar a determinar, se estiraba allí y se fraccionaba para la distribución a mediana escala.
Respecto de las armas encontradas, había tres pistolas 9 milímetros, una calibre 11.25 y un revólver calibre 38. Las cinco tenían número de serie, por lo que ya se cursaron los oficios correspondientes al Registro Nacional de Armas (Renar) para que determine quiénes son los titulares. De las tres 9 milímetros, ninguna correspondería con las robadas en Jefatura el año pasado. Las armas corresponden con los antecedentes, pesados, de Díaz: del “palo” de los ladrones violentos.
Fuente: Día a Día. http://www.diaadia.com.ar/policiales/buscaban-un-ladron-encontraron-un-narco