Dividido, Brasil volvió a protestar en las calles
Brasil inicia hoy otro mes clave para su futuro político e institucional, en el que comenzará a definirse la suerte de una presidenta suspendida en funciones y de un gobierno interino encabezado por quien fuera su vice y hoy es su peor enemigo.
Ayer, luego de varias semanas de relativa calma, miles de brasileños volvieron a salir a las calles para manifestarse a favor o en contra del juicio destituyente que afronta la presidenta suspendida Dilma Rousseff, quien podría ser apartada del cargo de manera definitiva en septiembre.
Convocados por grupos contrarios a la presidenta y dirigente del Partido de los Trabajadores (PT), como Vem pra Rua o el Movimento Limpa Brasil , los ciudadanos que rechazan el regreso de Rousseff al Palacio del Planalto alzaron sus voces en hasta 15 estados de todo el país. Sin embargo, la asistencia a los actos y protestas fue mucho menor a la de convocatorias anteriores.
Al grito de “Fuera Dilma”, ciudadanos vestidos en su mayoría de verde o amarillo recorrieron ayer algunos de los puntos más emblemáticos del país, portando pancartas que pedían la destitución de la jefa de Estado.
Rousseff afronta un juicio político en el Senado, acusada de incurrir en maniobras contables ilegales para maquillar los resultados del gobierno en 2014 y 2015, lo que podría suponer un “crimen de responsabilidad”, uno de los motivos previstos en la Constitución para justificar el impeachment .
En Brasilia, unas cinco mil personas, según estimaciones de la Policía Militarizada, recorrieron la Explanada de los Ministerios hasta llegar frente al Congreso.
También en la capital, un grupo de personas, que defendía la salida tanto de Rousseff como de su otrora vicepresidente y actual jefe de Estado interino, Michel Temer, tuvo que ser escoltado por la policía tras producirse un conato de enfrentamiento con aquellos que sí apoyan la permanencia del actual gobierno interino.
En Río de Janeiro, los detractores del PT se reunieron en la playa de Copacabana, donde cantaron consignas contra Rousseff y a favor del juez Sergio Moro, quien se ha convertido en un símbolo de la lucha contra la corrupción por su papel en la investigación del escándalo de la estatal Petrobras.
Por su lado, quienes desean el regreso de la presidenta, que fue suspendida del cargo el 12 mayo mientras responde al juicio político instaurado en el Senado, mostraron su apoyo a Rousseff y su rechazo a Temer en al menos 13 estados a lo largo del país.
El principal acto de apoyo a Dilma se produjo en San Pablo, la mayor urbe del país, donde miles de personas se congregaron en la plaza Largo da Batata, en la zona oeste de la ciudad. Vestidos en su mayoría con el color rojo del PT, reclamaron no sólo la vuelta de Rousseff, sino que además solicitaron una reforma política para evitar que se repita lo que consideran un golpe de Estado orquestado por el Partido del Movimiento Democrático de Brasil (PMDB) de Temer. El viernes habrá protestas contra Temer en el inicio de los Juegos Olímpicos de Río.
Fuente: La Voz del Interior. http://www.lavoz.com.ar/mundo/dividido-brasil-volvio-protestar-en-las-calles?cx_level=flujo_2