Dos de cada 10 bebés no se alimentan del pecho materno
Está más que comprobado que la leche materna es el mejor alimento que puede recibir un bebé. No sólo aporta las defensas necesarias para los primeros meses de vida sino también brinda herramientas para desempeñarse durante toda su vida. Tan buena es que la Organización Mundial de la Salud la recomienda como alimento exclusivo hasta los seis meses de vida. Sin embargo, sostener el hábito cuesta.
Apenas el 32 por ciento de los niños menores de seis meses recibe en Córdoba la leche materna como alimento exclusivo. Y otro 20 por ciento no sabe ni siquiera de qué se trata este beneficio. Así lo demuestra la Encuesta Nacional de Prevalencia de Leche Materna impulsada por el Ministerio de Salud de la Nación e implementada por la Dirección de Maternidad e Infancia de la Provincia.
La muestra fue realizada sobre la base de 1.300 encuestas contestadas por mujeres que se atienden en hospitales y dispensarios de la ciudad de Córdoba y el interior provincial.
Resultados. La encuesta revela que sigue costando en Córdoba instalar la lactancia materna como alimento exclusivo del bebé, antes de los seis meses de vida. Apenas tres de cada 10 mamás lo hacen. Los datos indican que este hábito decae a medida en que el niño crece: del 36 por ciento al segundo mes, 31 por ciento al cuarto y 26 por ciento al sexto.
“La meta ideal es llegar al 50 por ciento de las mamás que den el pecho a su bebé, como alimento exclusivo antes de los seis meses de vida. Esto es, sin otro tipo de comidas ni agua adicional. Está comprobado que la leche materna tiene todos los nutrientes necesarios para el desarrollo del niño. Además lo protege de enfermedades”, informó Analía González, directora de la Escuela de Nutrición de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Córdoba.
Ahora, si se tienen en cuenta las mamás que además de dar la teta al bebé incorporan algún otro alimento más sólido, el porcentaje crece. Es decir, que se alimenta con leche materna y otras comidas el 44 por ciento de los bebés de dos meses, el 33 por ciento de los niños de cuatro y el 42 por ciento de los pequeños de seis meses de vida.
El dato preocupante es que el 20 por ciento de los niños de esa franja etaria directamente no sabe lo que es tomar la teta. Y el porcentaje también se torna preocupante a medida en que el niño crece. Según estudios anteriores, esta cifra es escasa apenas el bebé nace y se va de alta: sólo el 5 por ciento no se alimenta con leche materna. Pero a medida en que pasa el tiempo, el total de “destetados” crece.
La encuesta indica que el 17 por ciento de los bebés de dos meses no toma leche materna. Y que la cifra aumenta al 31 por ciento a los cuatro meses. Finalmente, se estabiliza al 25 por ciento en los seis meses de vida del bebé.
“Cuando la mujer está internada, recibe el apoyo del equipo de salud. Pero cuando regresa a su casa, a veces las condiciones cambian. Se encuentra que está sola para las tareas del hogar y no recibe ayuda en la crianza de sus otros hijos. No puede sacarse leche cuando su bebé se lo pide y ahí comienza a descender la producción”, indica González.
Otro punto crítico es la vuelta al trabajo. “Pese a que hay leyes, son muy pocos los empleos que garantizan un lugar seguro, privado y protegido para que la mujer pueda extraerse la leche. Termina haciéndolo en el baño, un lugar con pocas condiciones de higiene que definitivamente no elegiríamos para comer”, agrega la especialista.
González destaca que la lactancia materna no es sólo un asunto de la mamá. “Debemos estar involucrados porque es una cuestión de supervivencia. Si la mujer no recibe apoyo, es probable que nunca tome la decisión de amamantar. Y así perdemos todos”.
Consejos. La leche materna se recomienda como alimento exclusivo hasta los seis meses de vida del niño. No se recomienda dar durante ese período comidas sólidas ni agua. Hasta los dos años o más, puede ir acompañada de otro alimento.
Aporta todos los nutrientes necesarios para que el bebé se defienda mejor de las enfermedades. A futuro, lo convierten en un ser más tranquilo. De pequeño, ha sido contenido en un ambiente seguro.
La decisión de la mujer de amamantar depende de muchos factores. Uno de ellos es el apoyo familiar y el contexto amigable de trabajo. La producción de leche aumenta cuando comienza la primera hora después del parto. La cesárea no influye.
Leche y algo más. A los seis meses de vida, el 42% de mamás le dan la teta y algún otro alimento sólido al bebé.
Fuente: Día a Día. http://www.diaadia.com.ar/cordoba/dos-de-cada-10-bebes-no-se-alimentan-del-pecho-materno