EEUU: fuertes cruces en el primer debate presidencial entre Trump y Biden
El primer debate presidencial de los Estados Unidos entre el mandatario actual, Donald Trump, y el candidato demócrata, Joe Biden, de cara a las elecciones que se llevarán a cabo en ese país el próximo 3 de noviembre, se realizó este miércoles por la noche en Cleveland, Ohio.
A un poco más de un mes de los comicios, ambos representantes intercambiaron ideas y cruces verbales en medio de una campaña que genera un alto nivel de incertidumbre respecto al futuro.
Sin ninguna coincidencia o momento de distensión, los dos candidatos a la Presidencia de Estados Unidos se enfrentaron con gritos, continuas interrupciones, ataques personales y hasta algunas agresiones en el primer debate a solo 35 días de las elecciones.
«Payaso», «poco inteligente», «mentiroso» fueron algunas de las palabras que se cruzaron los dos candidatos en los momentos más álgidos de una noche marcada por los esfuerzos constantes de Trump de interrumpir a su rival y hasta el moderador, y la determinación de Biden de no mirar nunca a su contrincante, concentrarse en la cámara y evitar las discusiones a los gritos.
A lo largo de 90 minutos, el candidato opositor repitió dos ideas centrales: «Trump no tiene un plan» y «No soy Bernie Sanders», «No soy un izquierdista radical» y «Ahora el programa del Partido Demócrata es el mío».
Trump, por su parte, intentó asimilar a su rival con las iniciativas del sector más progresista de los demócratas y con los reclamos de las protestas antirracistas de este año. Además, acusó varias veces a su hijo, Hunter Biden, de negocios corruptos en Ucrania y Rusia. Esto último tema fue lo único que sacó del registro moderado al exvicepresidente.
El debate en la Universidad de Case Western Reserve en Cleveland, Ohio, fue moderado sin mucho éxito por el veterano periodista Chris Wallace del canal Fox y estuvo regido por un estricto protocolo por la pandemia.
Trump aseguró durante el debate que entre 2016 y 2017 abonó «millones de dólares en impuestos», mientras que el candidato demócrata, Joe Biden, rechazó esa afirmación y remarcó que su adversario político «paga menos impuestos que los que paga una maestra» y agregó que el mandatario tiene «ventajas fiscales».
La pregunta del moderador se debió a que en los últimos días se dio a conocer una denuncia que señalaba que Trump había abonado en ese período apenas 750 dólares en impuestos.
Salud y pandemia
Ante ese cruce verbal, la máxima autoridad de los Estados Unidos lanzó un contraataque al señalar: «En 47 meses de gestión hicimos más que tú en 47 años».
Trump también afirmó que tiene «derecho» a elegir la vacante en la Corte Suprema, tras la muerte de la jueza Ruth Bader Ginsburg, mientras que el demócrata Joe Biden sostuvo que debe decidirlo el ganador de las elecciones que se realizarán el 3 de noviembre.
El plan de salud en Estados Unidos constituyó el primer tema de intenso debate entre el presidente de Estados Unidos y el candidato demócrata. Trump habló de abaratar el costo de los medicamentos y Biden retrucó: «Este hombre no tiene plan para los seguros médicos; no sabe de lo que está hablando».
En el primero de los temas abordados en el debate presidencial, el actual mandatario norteamericano ratificó su decisión de nombrar como sucesora a Amy Coney Barret.
«Deberíamos esperar a ver el resultado», agregó el candidato demócrata durante el primero de los debates presidenciales que tiene al periodista Chris Wallace como moderador y que está dividido en seis temáticas: Gestión e historial; Corte Suprema; la pandemia de Covid-19; Economía; Raza y violencia; y la integridad de las elecciones. Cada uno de los segmentos tendrá una duración de 15 minutos.
El debate continuó sobre el tema salud, la pandemia y la reapertura de la economía y las escuelas en medio de una curva epidemiológica que no desciende y ya suma más de 7 millones de contagios y más de 200.000 muertos.
«Trump ha actuado irresponsablemente, con respecto al uso de tapabocas y la distancia social. No confío en él para nada, confío en los científicos. Este es el mismo hombre que dijo que para Pascuas la pandemia iba a desaparecer o que mejor tomemos lavandina. Él sabía lo peligroso que era y simplemente no se los dijo», sentenció Biden.
Trump rechazó la premisa del opositor de que Estados Unidos es el país del mundo con más muertos: «No sabes cuántos murieron en Rusia o en China. Ellos no dan los números»- y sostuvo que el sistema de salud creado por Obama «es un desastre, no importa cuán bien se lo trate de manejar».
Mientras Biden prometía expandir Obamacare -como se conoce al sistema de salud actual-, Trump lo acusaba de querer crear «un sistema socialista», un adjetivo que repitió una y otra vez a lo largo de toda la agenda de la noche.
Situación económica y social
«Él quiere cerrar este país y yo quiero mantenerlo abierto», sentenció el candidato a la reelección y repasó las cifras económicas previas a la pandemia y los últimos números que muestran una pequeña recuperación.
En este punto, Biden repitió su muletilla de la noche: «No tiene un plan: ni para la pandemia ni para reabrir la economía». «¿Por qué quiere seguir abriendo la economía cuando no solucionó la crisis de Covid? No se puede arreglar la economía hasta que no arregle la crisis de Covid», aseguró el demócrata.
En el segmento económico, el candidato opositor hizo una promesa concreta -«Voy a anular los recortes impositivos aprobados por el Gobierno de Trump»-, mientras el mandatario negó por completo la filtración de sus declaraciones impositivas publicadas por el diario The New York Times, en las que se ve que pagó solo 750 dólares en impuestos federales en 2016.
«Pagué millones de dólares en impuestos federales a las ganancias en 2016 y 2017», aseguró Trump.
Uno de los últimos temas de la noche fue la creciente tensión racial y las múltiples protestas contra la brutalidad policial en los últimos meses.
Ni Biden quiso apoyar explícitamente el movimiento que lidera estas protestas, Black Lives Matter (Las Vidas Negras Importan), ni Trump aceptó repudiar claramente a los grupos supremacistas y milicias que atacaron algunas manifestaciones.
Biden dijo estar «completamente en contra de desfinanciar a las policías» -como se pide en las protestas- y, mientras reconoció que «existe un racismo sistémico en el país», aseguró que «la mayoría de los policías son buenas personas, pero hay algunas manzanas podridas».
Trump, por su parte, acusó a su rival de estar «en contra de la ley y el orden» y planteó una escalada de violencia unilateral por parte de los manifestantes: «Casi toda la violencia que veo viene de la izquierda.»
Ya hacia el final, Trump intentó esquivar las preguntas sobre las evidencias científicas que demuestran el cambio climático: «Quiero agua y aire limpios y hermosos, pero no quiero destruir a las empresas. Por ejemplo, estamos plantando un millón de árboles.»
La noche concluyó con uno de los temas que más preocupan: la posibilidad de que el mandatario no reconozca una derrota en las urnas.
«Cuento con que la Corte Suprema cuente las boletas. esperemos no necesitarlo, pero cuento con ello porque podría ser una elección manipulada, un fraude», advirtió el mandatario, mientras Biden volvió a pedir que «todos voten de la mejor manera que puedan y quieran».
Los otros dos debates presidenciales están previstos para el 15 y 22 de octubre, en Miami, Florida, y en Nashville, Tennessee, respectivamente.
Por su parte, el vicepresidente Mike Pence se medirá con la compañera de fórmula de Biden, la senadora Kamala Harris, el 7 de octubre en Salt Lake City, en el estado de Utah.
Fuente: La Mañana. La Mañana