Energía solar, una posible alternativa frente al aumento de tarifas
El tarifazo llegó, y los números son bastante preocupantes, las facturas del Buenos Aires y el Conurbano que pagaban $25 mensuales, ahora pasarán a pagar entre $ 150 (con consumos bajos, en consumos más altos, la tarifa por kilovatio se incrementará). Presentado así, el aumento será del 600%.
Si este rango de precios va a durar, no alcanzará con estar más atento a que no queden prendidas las luces. Será hora de pensar algunas soluciones a largo plazo para ahorrar energía.
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Sabemos que la calefacción y la refrigeración son el Talón de Aquiles del ahorro energético hogareño. Estufas de cuarzo, acondicionadores de aire, turbo calefactores y hornos eléctricos están entre los asesinos seriales del consumo doméstico de electricidad. Si bien, en Argentina, la mayor parte de las casas se calientan con gas o combustibles, no falta mucho para que también le llegue el aumento.
Para bajar los consumos, los sistemas alternativos más eficientes son los que aprovechan la energía solar. Los sistemas de calefacción solar, pueden ahorrar un 50%; los termotanques solares, un 80% del consumo de gas; y los grupos electrógenos solares, que además de proveen de electricidad durante los cortes de energía, pueden ahorrar alrededor de un 40%. Además, para dentro de 6 meses se promete la llegada de acondicionadores de aire frío-calor con asistencia solar, que bajarían mucho el consumo.
La calefacción solar se produce mediante colectores solares que captan la energía calórica del sol y la almacenan en tanques de agua para ser usados en los momentos necesarios. Es recomendable que este sistema esté complementado por otro de tipo convencional para tapar los baches de captación de energía solar. Un sistema como este, para ahorrar alrededor del 60% del consumo en calefacción en una vivienda de 100 metros cuadrados, puede costar alrededor de 76 mil pesos.
De la misma manera que la calefacción solar funcionan los termotanques solares, aunque el rendimiento de estos es muy alto y pueden sustituir casi totalmente a un sistema tradicional.
Cabe aclarar que el desempeño de cualquier sistema basado en la captación de energía solar depende de la cantidad de días soleados. Si bien es cierto que igual funciona en días nublados, su eficiencia disminuye. Un termotanque solar puede costar alrededor de $5.500.
Una de las alternativas más novedosas de utilización de fuentes de energía renovable son los grupos electrógeno solares. “Estos equipos se componen de tres productos: paneles solares, un inversor híbrido y un banco de baterías”, explica Pablo Greco, gerente comercial de Hissuma. Lo bueno de este sistema es que mezcla el consumo de la red con el que se produce mediante los paneles solares. De este modo, cuando la producción solar es alta, se consume menos de la red, y al revés, cuando baja, se toma mas de la red. Además, como el sistema almacena energía, ante cortes de luz, se apela a lo guardado en las baterías.
“Para una casa que consuma los 500 kWh promedio, sería suficiente un grupo electrógeno solar compuesto por 3 paneles de 3 kW, un inversor de 1 kW y baterías para 4 kW”, afirma Greco. Ese equipo podría abastecer la heladera con freezer, la tele y las computadoras, además de proveer energía si hay un corte por 4 horas, si es de noche; o más, si es de día. Un sistema de este tipo puede costar alrededor de 60 mil pesos. Con el aumento de tarifas que se anunció, la asistencia de sistemas solares conectados a los tradicionales parece cada vez más tentador. Por lo que se anunció, una casa que hoy paga $ 600 pesos bimestrales de luz, pasará a pagar $3.600 o más. El grupo electrógeno solar le podrá ahorrar $8.640 al año. Así, el equipo se pagaría en 7 años.
Para Greco, los precios de estos sistemas tenderán a bajar en el futuro debido a la facilitación de las importaciones. “El costo de un grupo electrógeno solar se debería recuperar en 5 años con el ahorro en consumo. “Hoy, si tenés en cuenta que este sistema solar también reemplaza a un generador que consume combustible fósil, el recupero puede estar en dos o tres años”, afirma el especialista.