Un femicidio cada 34 horas en el país: 21 mujeres fueron asesinadas en enero
Cada 34 horas hay un femicidio en la Argentina, según el Observatorio Mumalá. Los escenarios cambian pero las víctimas son las mismas: mujeres que mueren desprotegidas por falta de respuestas del Estado. En enero desde La Nueva Mañana registramos 21 femicidios en el país. En la provincia de Córdoba hubo uno solo hasta el momento.
Los cuerpos de las mujeres asesinadas aparecen en sus casas, al costado de una ruta, en una calle oscura, enterrados, o abandonados. Hacer una lista con los nombres de las víctimas de femicidio es una manera de registrar no sólo las violencias sino también las distintas formas en las que se ausenta el Estado permitiendo así que el patriarcado actúe. Una ex pareja, la pareja, el padre de los hijos, el novio o un vecino: el 79% de los femicidios durante el 2018 fueron cometidos por alguien del círculo cercano a la víctima.
Apenas comenzado el 2019, el 1º de enero, ocurrió el primer femicidio en Santiago del Estero. El policía Héctor Montenegro asesinó a Celeste Castillo, su novia, y luego se quitó la vida. Él tenía 24 años y para asesinarla usó su arma reglamentaria. Ella tenía 25.
El 4 de enero, Valeria Juárez de 32 años fue asesinada por su padre en la localidad de Roque Saénz Peña en Chaco. En medio de una pelea, Elías Juárez de 63 años le disparó a su hija con una escopeta y con el mismo arma se suicidó.
A Daiana Moyano la asesinaron la noche del 6 de enero cuando volvía de trabajar. Tenía 24 años, era madre de dos niñas, y formaba parte de la organización feminista Las Omas, integrada por mujeres que viven en la zona de Chacras de la Merced. Es el primer femicidio del 2019 en Córdoba.
Joselin Nayla Mamani tenía 10 años cuando fue asesinada: la apuñalaron 30 veces en la cara y en la espalda el 7 de enero en la localidad bonaerense de Longchamps. Los tres sospechosos del femicidio son ex parejas de la madre. Fue ella quien encontró su cuerpo.
El 8 de enero Sergio Alejandro Cejas violó la perimetral que la Justicia había dictado y asesinó a balazos a Gisel Romina Varela, de 33 años, en Mar del Plata. Ella era policía y esa mañana cerca de las 6.30 esperaba el colectivo para ir a trabajar. En ese momento se acercó el femicida a bordo de un automóvil y le disparó dos veces. Cejas era su ex pareja y ex policía.
Al día siguiente falleció Liliana Loyola, la mujer sanjuanina que fue quemada por su propio hijo. Estuvo un mes y 11 días internada en el Servicio del Quemado del Hospital Marcial Quiroga hasta que finalmente el 9 de enero murió por la gravedad de las heridas. Juan Eduardo Echegaray, de 27 años, es su hijo adoptivo y aparentemente le prendió fuego porque no le quiso dar plata. Se fugó y finalmente fue detenido el 10 de enero.
El 12 de enero asesinaron a golpes en el ascensor de su edificio en Mar del Plata a Susana Yas, una jubilada de 77 años. Su cuerpo fue encontrado este sábado en un depósito de la planta baja del edificio. Los investigadores sostuvieron que la víctima fue asesinada en el ascensor y luego fue arrastrada hasta ese lugar.
Dos días después, tras una intensa búsqueda encontraron asesinada a Agustina Imvinkelried. La joven de 17 años había salido a bailar el sábado con sus amigas y nunca regresó a su casa en la ciudad de Esperanza, en Santa Fe. Ella se había subido a un auto alrededor de las 6 de la madrugada. La Policía identificó al propietario del vehículo, Pablo Trionfini, de 39 años, y cuando ingresaron a su vivienda lo encontraron ahorcado. El cuerpo de Agustina fue encontrado en la mañana del 14 de enero tapado con hojas y ramas en la zona sur de la ciudad. El femicidio ocurrió el 13 de enero.
48 horas después ocurrió un nuevo femicidio en Santa Fe: Jorge Trossero fue detenido en su casa de la localidad santafesina de Gálvez señalado como responsable del asesinato de Danisa Canale, de 38 años. El hombre de 50 años fue quien llamó al servicio de emergencias para que atendieran a su esposa, tras golpearla 38 veces con un martillo en su vivienda. La mujer fue llevada al Hospital José María Cullen, pero murió ese 15 de enero cuando llegó al centro de salud por la gravedad de las heridas.
Un día después, el 16 de enero, otro policía usó un arma reglamentaria para asesinar a una mujer en Buenos AIres. La víctima fue Romina Ugarte de 26 años, también efectivo de la policía bonaerense que recibió un disparo en el rostro por parte de su novio, Nicolás Agüero. El crimen ocurrió después de que la pareja tuviera una discusión. Ugarte recibió un disparo de un arma 9 milímetros (la que usa la bonaerense) entre la nariz y las cejas. A raíz del asesinato, desafectaron de sus funciones al sospechoso, que tiene 27 años y fue imputado por homicidio calificado.
Carla Soggiu apareció sin vida el 17 de enero. Aún faltan pericias para determinar la causa de su muerte pero se enmarca en un hecho de violencia de género ante la falta de respuestas del Estado cuando una mujer está en riesgo. Ella tenía botón antipánico porque su ex pareja, Nicolás Fuentes, la agredió y quedó detenido en el Penal de Marcos Paz. Cuatro días antes de desaparecer ella activó dos veces el artefacto. Desde la Policía le respondieron pero no fueron a buscarla con inmediatez. Aunque el principal sospechoso estaba detenido al momento en que apareció el cuerpo, no se descarta que tenga vinculación con el crimen.
El 20 de enero, Manuel Salgado asesinó a puñaladas a su ex pareja, Ramona Romero, y luego se quitó la vida. Él tenía 19 años y ella 22. La mujer era madre de tres niños de 3, 5 y 6 años de una pareja anterior, y había finalizado su relación con Manuel Salgado hace pocos días. En el momento del crimen, sus hijos se encontraban en la vivienda de la provincia de Corrientes.
A día siguiente, el 21 de enero en Mendoza, Alberto Sosa, de 54 años, asesinó a Liliana Ramona Olguin, de 49 años, en la casa donde vivían. Los vecinos sintieron gritos y alertaron a la Policía que llegó minutos después y encontró el cuerpo de la mujer con múltiples heridas de arma blanca en el cuello, tórax, brazos y piernas. Sosa fue detenido y está imputado por homicidio agravado por mediar violencia de género.
Ese mismo día, nuevamente en la provincia de Corrientes, se registró otro femicidio. El 21 de enero, Sandra Bordón, de 35 años, fue encontrada asesinada a golpes en su casa de Goya, en Corrientes. Por el crimen, fue detenida su pareja, Omar Castañeda de 35 años, quien estuvo varias horas prófugo.
Un día después, Ariel Acosta, un teniente de la Policía bonaerense mató a Mariana Del Arco, su ex pareja, también integrante de la misma fuerza, y luego se quitó la vida. Acosta esperó que la víctima volviera de la playa y tras una fuerte discusión le disparó. Ocurrió el 22 de enero en Buenos Aires.
A Angelina Cáceres la encontraron asesinada el 25 de enero. La niña de 13 años se encontraba desaparecida desde el 23 de diciembre pasado en Chaco. Por su desaparición detuvieron a Alejandro Domínguez, un joven de 21 años, con el que había quedado en encontrarse luego de mantener una conversación por chat.
Al día siguiente, encontraron asesinadas a dos hermanas israelíes que estaban desaparecidas en la localidad mendocina de Guaymallén. Los cuerpos de Pirhia Sarusi, de 63 años, y Lily Pereg, de 54, fueron hallados el 26 de enero en una habitación de una obra en construcción ubicada al fondo de una vivienda perteneciente al hijo de una de ellas. Gil Pereg, el hombre de 37 años, se encuentra detenido e imputado de haberlas asesinado.
El 29 de enero, después de dos semanas de búsqueda, finalmente fue hallado el cuerpo de Gissella Solís Calles, la odontóloga de 47 años que estaba desaparecida en La Plata. Encontraron su cuerpo enterrado a 40 centímetros de profundidad en un terreno descampado de Punta Lara, localidad ubicada a 53 kilómetros de la ciudad de La Plata. El único sospechoso hasta el momento es su pareja, Casimiro Abel Campos, un ex combatiente de Malvinas de 56 años, quien se suicidó en la habitación de un hotel mientras la Policía lo buscaba.
Ese mismo día, el femicida de Valeria Coppa también se fugó después de dispararle en la frente a las cuatro de la tarde frente a la Catedral de Bariloche. Mariano Cordi, ex pareja de la víctima, tiene antecedentes por violencia de género. Finalmente fue detenido este viernes: se había escondido en una montaña.
Al día siguiente, Juana Carolina Brítez falleció después de estar internada más de 10 días por severas quemaduras en el Hospital San Roque de La Plata. En medio de una discusión, su pareja Isidoro Brizuela, de 26 años, la apuñaló y la prendió fuego. La mujer de 34 años estaba embarazada de cinco meses. Él también falleció por las heridas de las quemaduras.
Aún faltan los análisis finales que arrojen mayor claridad respecto a la muerte de Paula Gimenez Carrizo. El 30 de enero encontraron el cuerpo de la niña de 15 años en la localidad de Aconquija, en Catamarca. Dos días antes había salido a caminar junto a su primo, Samuel Federico Carrizo, de 22 años, quien se encuentra detenido.
Todavía no hay estadísticas oficiales que registren los femicidios, es una de las principales demandas del movimiento Ni Una Menos que este año realizará la quinta marcha consecutiva exigiendo que cese la violencia de género y que el Estado brinde políticas públicas efectivas.
Si sos víctima de violencia de género o conocés a alguien que necesite ayuda, comunicate a la línea nacional y gratuita 144, que funciona todos los días del año, las 24 horas.
Fuente: La Mañana. La Mañana