Ni en la cárcel, ni en los internados: La salud mental está en las calles
El próximo domingo 7 de octubre se realizará por segundo año consecutivo el Festival por el Derecho a la Salud Mental. El lugar de encuentro será la plaza Vélez Sársfield, desde las 16 en adelante, y en esta oportunidad, el lema elegido fue ‘La salud mental sale a las calles’.
La licenciada en trabajo social Luciana Arias, integrante del Colectivo por el Derecho a la Salud Mental de San Francisco (CDSM) –a cargo de la organización del festival- detalló que, al igual que el año pasado, contarán con la participación de diferentes artistas y grupos musicales, y que además habrá lecturas de poesías, servicio de cantina y feria, y precisó que la actividad se planificó con el apoyo de la Delegación local del Colegio de Psicólogos.
El CDSM de San Francisco se formó luego del festival desarrollado el año pasado, y lo integran un grupo de personas usuarias de los servicios de salud mental, familiares de los mismos, y profesionales de la salud pero también de otras áreas. Arias aclaró que el grupo que lo conforma es heterogéneo “porque la salud abarca a todas las profesiones y personas y requiere un abordaje interdisciplinar”.
Expresó que se reunieron para defender el respeto a los derechos plasmados en la Ley Nacional N° 26.657 “para dar cuenta de la situación a nivel local, evaluando avances, retrocesos y deudas pendientes en relación al respeto por los usuarios de los Servicios de salud mental, la no discriminación, la garantía de dispositivos alternativos al encierro como hospitales de día y de noche, casas de medio camino y de convivencia, espacios socio laborales y equipos territoriales que trabajen en el fortalecimiento de las redes comunitarias”.
“Buscamos visibilizar pre conceptos sobre ‘la locura’ cuestionando ¿quién es normal? ¿quién define la anormalidad? ¿quiénes se benefician y quiénes se perjudican en todo ésto?, y abordar de forma respetuosa el padecimiento subjetivo de cada persona” aseguró, y agregó que reclaman por la garantía de los derechos, no sólo por parte del Estado, “sino también de las obras sociales, para que otorguen la cobertura de salud que cada usuario precise y que no se límite en días o prestaciones que no contemplan la complejidad del padecimiento subjetivo”.
Expuso que el trabajo que realizan también busca generar conciencia en la comunidad para que exista una mayor inclusión de las personas que poseen diferentes padecimientos subjetivos, «y para que en los medios de comunicación estén al tanto de esta situación, y que la labor periodística en cuanto a salud mental sea con el debido respeto y cuidado, empezando por desmitificar ciertas palabras”.
Según la licenciada, poner en debate estas cuestiones y desnaturalizar las lógicas manicomiales “para hacerlas visibles y poder cuestionarlas a través de la apertura del diálogo, instalando la problemática por las que atraviesan los profesionales de la salud mental y los propios pacientes, particularmente en la sociedad sanfrancisqueña”, es otro de los objetivos de la actividad, y argumentó que “es importante no estigmatizar a las personas con un padecimiento mental ni considerarlos como estados inmodificables”.
Declaró que es fundamental que toda la comunidad participe y se comprometa con esta causa, “porque hay demasiados prejuicios en cuanto a la salud mental y es importante empezar a desmitificar algunas cuestiones que se encuentran, equívocamente, arraigadas en la sociedad”, y explicó que el CDSM es un espacio “abierto a cualquier persona de la comunidad que quiera sumarse a formar parte, convencidos de que la salud mental está en las calles, en los barrios, en las comunidades y no en las cárceles ni en los internados”.
Por Julieta Balari.-