La Nación anunció nueva suba de la luz y criticó a EPEC
El Ministerio de Energía de la Nación puso ayer en marcha un nuevo cuadro tarifario de energía eléctrica, que representará aumentos de entre el 13 y el 17 por ciento para los residenciales y hasta del 40 por ciento para los de mayor consumo. Con esto, se avanzó en el sendero de reducción de subsidios previsto y se trasladó a precios parte del impacto de la devaluación del peso.
Desde ayer, el megavatio para los residenciales y usuarios con demandas de hasta 300 kW mensuales subió 36 por ciento: pasó de 1.080 a 1.470 pesos. Eso tendrá una incidencia de entre el 13 y el 17 por ciento final, según calculaban anoche en Epec, sin considerar los eventuales aumentos que pueda disponer la empresa para los tramos de distribución y transporte.
En ese punto, el ministro de Energía, Javier Iguacel, fue particularmente crítico con las gestiones de Córdoba y Santa Fe, a quienes las trató de ineficientes y las desafió a no trasladar subas propias a los usuarios.
En tanto, para los que tienen más de 300 kW de demanda contratada al mes, la suba es del 64 por ciento, porque el megavatio pasa de 1.397 pesos a 2.283 pesos. Aquí se encuentran los consorcios de edificios, pequeñas industrias y grandes comercios, que en la boleta final verán un aumento de entre el 30 y el 46 por ciento. En tanto, los que sólo contratan transporte pasarán de pagar 44 pesos a pagar 64 el mega por hora, con una suba del 45 por ciento.
Iguacel fue durísimo con Córdoba y Santa Fe, a quienes acusó de cobrar hasta cuatro veces más por distribuir la energía de lo que cobran en Buenos Aires. Dijo que un usuario de Capital Federal que consume 300 kilovatios al mes paga final 124 pesos, mientras que uno de Córdoba paga 564 pesos y uno de Santa Fe, 496. “¿Cómo se explica que un cordobés o un santafesino paguen el doble que en Buenos Aires? Se explica por las decisiones de las empresas provinciales y no por el costo de la energía nacional que les factura Cammesa a todas por igual”, soltó Iguacel.
“Confiamos en la capacidad de los gobiernos provinciales de Santa Fe y de Córdoba de tener la inteligencia y desarrollar lo que tengan que desarrollar para no seguir aumentando el costo de distribución a las Pyme, comercios y usuarios, y que los aumentos sean del orden del 15 por ciento”, sostuvo. Desde la Epec indicaron que “aceptan la quita de subsidios de la Nación, aunque esto signifique un golpe al bolsillo de los cordobeses”. En Córdoba, está anunciada una suba del seis por ciento (dos en agosto, en septiembre y en octubre). Muchos entendieron la crítica de Iguacel a Córdoba como un guiño indirecto a la discusión del convenio colectivo que se inició ayer mismo en Trabajo de la Nación.
Estas subas no reducen el subsidio a la energía mayorista que consumen los residenciales, que sigue en un 33 por ciento, aunque sí para los de mayor demanda, que pasaron a cero. Iguacel no dio datos de cuánto será el ahorro fiscal, pero dijo que “hay dos años” para reducir los subsidios, en referencia al acuerdo con el FMI, que termina en 2020. En el esquema de su antecesor Aranguren, se llegaba a cero en octubre de 2019, con lo que dejó entrever que habrá al menos un año más de subsidios energéticos.
Sí dijo que no se aplican los aumentos del 60 al 70 por ciento, como arrojaban los cálculos previos, porque se bajó el precio del gas que compra Cammesa (de 5,20 a 4,20 dólares el millón de BTU) y que se seguirá trabajando en bajar los costos de generación.
Calefacción con luz, mejor olvidarlo
El ministro de Energía cuestionó la política K.
Iguacel cuestionó la política energética del kirchnerismo y atacó, entre otras cosas, el uso de la calefacción eléctrica, por cara e ineficiente. “En ningún país que hay gas natural y potencial de recursos se promueve el uso de la calefacción eléctrica, los que cayeron en la trampa y tienen un departamento en Palermo con piso radiante eléctrico y les llegan cuatro mil pesos, sepan que es porque es ineficiente el sistema eléctrico para calefaccionar”, espetó.
Fuente: La Voz del Interior. La Voz del Interior