Murió el Papa Francisco, el primer Pontífice argentino
El argentino Jorge Bergoglio fue el primer Papa latinoamericano. Falleció a las 7.35 hora de El Vaticano, en su residencia. El domingo se había mostrado en público por última vez durante la misa del Domingo de Pascua.
El papa Francisco murió este lunes a las 7.35 hora italiana en su residencia de la Casa Santa Marta, anunció en un vídeo mensaje el camarlengo, el cardenal Kevin Joseph Farrel.
«Con profundo dolor tengo que anunciar que el papa Francisco ha muerto a las 7.35 horas de hoy, el obispo de Roma ha vuelto a la casa del padre, su vida entera ha estado dedicada servicio del Señor y de su Iglesia y nos ha enseñado el valor del evangelio con fidelidad, valor y amor universal y en manera particular a favor de los más pobres y marginados», anunció Farrel.
Y continúo: «Con inmensa gratitud por su ejemplo como discípulo del Señor Jesús recomendamos el alma del papa Francisco al infinito amor misericordioso de Dios Uno e trino».
El primer papa americano
Jorge Bergoglio entró a la historia como el primer americano que llegó a ser Papa. Durante su tiempo como líder de la Iglesia Católica, reformó el gobierno del Vaticano, trabajó por la paz y la reconciliación, guió a la Iglesia a través de algunos de los momentos más oscuros de los últimos años y tomó medidas revolucionarias contra el abuso infantil por parte del clero.
Fue el 13 de marzo de 2013 cuando el entonces Arzobispo de Buenos Aires, Jorge Bergoglio, fue elegido como Papa Francisco. Ocurrió tras la renuncia de Benedicto XVI, un tiempo en el que el Vaticano aún estaba inmerso en el escándalo de «Vatileaks», una filtración de documentos que revelaron casos de corrupción y encubrimiento de casos de pederastia, situación que había empujado en parte a Benedicto XVI a renunciar el 28 de febrero. Por todo esto, la elección del Papa argentino fue recibida por los fieles como una brisa fresca pero muy pronto se vio que estaba destinada a sacudir a la Iglesia.
Bergoglio sorprendió por su ruptura de los moldes establecidos por su predecesor alemán, más ceremonioso y teológico en sus discursos. La modesta vestimenta con la que fue presentado a Roma fue una señal inequívoca de que su papado estaría atado a su personalidad. Dijo que buscaría devolver a la Iglesia a su esencia más pura y la elección de su nombre papal fue el primer gesto de su misión: sería llamado Francisco, en honor al santo de Asís del siglo XIII que recibió de Dios el llamado a «reparar la Iglesia».