Vuelve el Cosquín Rock con agenda renovada
Fueron 20 años de ediciones ininterrumpidas desde aquella piedra fundacional que José Palazzo y Perro Emaides pusieron en la Plaza Próspero Molina en el 2001 y que luego se mudó a la Comuna de San Roque para desembarcar en Santa María de Punilla.
Por José María Novarese – Enviado Especial DSF
Fueron 20 años de ediciones ininterrumpidas desde aquella piedra fundacional que José Palazzo y Perro Emaides (recientemente fallecido) pusieron en la Plaza Próspero Molina en el 2001. El Festival más grande del país se mudó de la ciudad de Cosquín a Comuna San Roque para luego aterrizar en el año 2011 en el Aeródromo de Santa María de Punilla, lugar donde se estableció definitivamente.
Fue la pandemia, como a tantos otros eventos similares, quien obligó a que se corte la seguidilla de ediciones y en el 2021 no hubo Rock en la montaña. Es por ello que las expectativas para este 2022 son muy grandes, y el Ceo de Cosquín Rock José Palazzo entiende mucho de todo esto. Apostando a las nuevas generaciones y sus nuevos sonidos, exponentes como Wos, Trueno, María Becerra o Zoe Gotusso toman lugares preponderantes en la guilla, mezclándose con clásicos como Ciro y Los Persas, Divididos, Skay y los Fakires, Las Pelotas (que tendrán su propia carpa con show acústico para las dos noches), o espacios tradicionales como la Casita del Blues, escenario dedicado exclusivamente al género nacido en el sur estadounidense.
Otra de las grandes apuestas a la que apunta el festival este año, es al prometedor cierre que encabezará el más importante cantante cordobés, Carlitos “La Mona” Jiménez será quien le baje el telón a la 21° edición de Cosquín Rock, con un show cuartetero compartido con amigos rockeros, que se sumarán a la fiesta cordobesa más famosa.
Serán 8 los escenarios distribuidos estratégicamente en el enorme predio del aeródromo, por ellos pasarán más de 150 bandas entre el 12 y 13 de Febrero, esperando una concurrencia cercana a las 100.000 personas, para que a base de pogo, vuelvan a hacer vibrar la montaña.